Under cover of darkness ~

Le sacó la lengua, sonriendo levemente luego.

Conn: Solo quiero ayudarte...

Se abrazó las rodillas, observando al frente. Entendía los peligros... a medias. Quizás en su mente ya no veía como peligroso a Yure. De hecho, a pesar de su fuerza, su rapidez y de su estado de demonio, lo veía incapaz de lastimar a una mosca por cuenta propia.
Y odiaba verlo tan acomplejado por la posibilidad de lastimar a alguien.

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Seiko: Ojalá todos pensaran como tu...

Se levantó, yendo hacia el espejo sin saber que esperar. Decir que se quedó sin palabras, era quedarse corto, parecía su piel, el tono verdoso mohoso se había ido y hasta parecía más pequeño.
Podía volver a ver a la chica capaz de dar vuelta cabezas, aun vestida en pijamas.
Se le llenaron los ojos de lágrimas, pero las contuvo. Se olvidó de su estado y abrazó a Stred, escondiendo el rostro en él.

Seiko: Gracias... Es hermoso

Yure: Lo sé...

En parte le hacía acordar a Dal, queriendo ayudar. Había claras diferencias entre una y otra, pero.... quizás su esencia, era la misma.
Elevó el rostro levemente, observándola. Se preguntó por qué estaría realmente en esa vida, siendo que podía ser tan libre como deseara.

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(N/A: Realmente no quiero pensar si está en tetas o en corpiño xD)

Se sonrojó furiosamente, sin moverse. ¿Qué hacer? Si la abrazaba, quedaba mal. Si no lo hacía, parecía un insensible. Suspiró, elevando su mano lo suficiente como para palmarle la cabeza con ternura.

Stred: Realmente... me alegro que te guste...

Hizo una mueca, dando por terminado el tema. No aceptaría. Y ella debía respetar eso. Se dejó caer contra él, cerrando sus ojos. ¿Acaso tratar tanto con humanos comunes y corrientes la había dejado predispuesta a hacerse amiga de un demonio?

Conn: Eres raro...

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(corpiño xDD)

Se soltó de él luego de unos instantes. Apenas lo conocía, y ya lo abrazaba... consecuencias de vivir aislada y atemorizada.
Asintió, volviendo a admirar la obra de arte en su espalda.

Seiko: Eres realmente bueno con esto

Cerró los ojos, relajándose.

Yure: ¿Por qué lo dices?

Sabía que era raro, era consciente de eso. Pero, ¿había motivo alguno para decírselo?
Suspiró, recordando el verdadero motivo de por qué había decidido salir de la casa. Además de, claramente, el sentirse encerrado.

Yure: Len se la pasa en mi cuarto últimamente. Dal terminó con él.

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Asintió levemente, aún sin poder combatir el sonrojo que le abatía. Decidió comenzar a acomodar sus utensillos, para pensar en otra cosa, pero le era difícil.

Stred: Ya sabes, puedes venir antes de que el local abra y te maquillaré. Sólo debes avisarme antes.

Se quedó callada al oirlo, sin moverse. Era relajante, y le venía bien desconectarse.

Conn: No es la persona mas amistosa... pero no me gusta la idea de que sufra

Después de todo, le había permitido quedarse y no la había atacado.
Un pensamiento le cruzó por la cabeza y se volvió a incorporar, observando con recelo a Yure. Todavía no había olvidado cómo la miraba.

Conn: No me digas que termino con él por... ti

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Por fin dejó el espejo de lado, volviendose a sentar en la silla, con el respaldo cubriendole el pecho, y observó a Stred ordenar su equipo. Tenía talento.

Seiko: Me encantaría...

Se le ocurrió una idea, recogiendose el cabello para que su rostro quedase al descubierto completamente, incluso las dos marcas en sus pómulos.

Seiko: ¿Crees que podrías cubrir estos también?

Pudo notar la mirada, que no hizo más que causarle más gracia a la situación. ¿Por qué le miraba con recelo, como si hubiese hecho algo malo?

Yure: No, eso ni soñando..

Dejó de reirse, para recostarse nuevamente sobre el hombro de Conn, tranquilo, mirando al cielo.

Yure: Lo dejó por otro chico. Parece que le conocía de antes... y la hace realmente feliz. Nunca la había visto así. Casi no parece ella...

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Stred: Claro

Se acercó a ella, maquillando con algunos restos sus pómulos, agregándole incluso algo de rubor. No pudo evitar sonrojarse al notar lo hermosa que sería sin aquellas marcas.

Stred: Listo, deberías verte

Se quitó los guantes, arrojándolos en el cesto de la basura, mientras observaba a Seiko.

Por alguna extraña razón -que prefirió ignorar con creces- eso la había aliviado. Dejó que se recostara, apoyando su cabeza contra la de él.

Conn: Si es feliz, entonces me alegro por ella.

Aunque seguía pensando en Len. Esperaba que no estuviese demasiado mal.

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Lo hizo, y todo el peso que tenía en los hombros desapareció sin más. Nunca creyó poder volver a verse así, hermosa, y normal. Sabía que solo era maquillaje pero...
Lo observó sin poder creerse su suerte.

Seiko: Estoy en deuda contigo

Yure: Lo mismo pienso yo, pero Len está destruído... -bostezó levemente- Siempre pensé que quizás estaba obsesionado y no enamorado de ella...

Era demasiado controlador para su gusto, pero quizás sólo era que sus métodos de amar eran completamente diferentes. Es decir, eran personas distintas, quizás el amor se manifestaba distinto, ¿o no?

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Stred: No me debes nada, a decir verdad me sirve de práctica

Luego de guardar todo, fue a lavarse las manos y la cara, finalmente relajándose.

Stred: Debe sentirse bien, ¿no? Cubrir un poco eso que te molesta tanto

Conn: No lo conozco lo suficiente... pero dolor es dolor, y puede destruirte de igual manera.

No sabía si ella había amado realmente a alguien. Recordó aquel caballero con el que comparió un par de noches. ¿Qué sería de él ahora? Le había caído bien, era atractivo y sus besos sobre su cuello le habían causado temblores, pero no sentía amor, eso era seguro.

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Seiko: Me siento liberada. Hace tres años que no veo mi rostro como debe ser.

Le sonrió ampliamente. Calculando que ya había pasado la media hora, volvió a colocarse la remera, pero dejó la capa a un lado, sin deseos de cubrirse ya.

(N/A: ¿Está hablando de mi Ruettu? xD)

Yure: Yo sí lo conozco... pero no sé qué pensar

Quería ver feliz a ambos. Más a Dal que a Len, quizás, pero a ambos en fin. Y quería que Len sobrepasase todo eso, pero no sabía cómo ayudarle. O siquiera si ayudar en realidad.

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Stred: Tres años... vaya...

No podía imaginarse tres años ocultándose. Una cosa era ocultar tatuajes o piercings, pero otra diferente era ocultar tu entera existencia. Definitivamente, eso no era algo para él.

(ese mismo xD)

Conn: Yo pienso que todo se supera, con el tiempo.

Era verdad que no entendía el amor. No entendía porque alguien se enamoraba si tarde o temprano terminaría sufriendo. Pero lo respetaba, y la felicidad de las parejas que veía era... hermoso en cierto sentido.
Pero también era cierto que ella había amado a sus padres, o debería haberlo hecho. Si ya su perdida no le causaba dolor...

Conn: Le dolerá, pero seguirá adelante.

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Seiko: Ha sido... solitario.

Y por eso estaba tan feliz de haber encontrado a alguien que la aceptara por como era. Con sus "rarezas" y todo. Bajó la vista unos segundos y, no sin cierto arrepentimiento, quitó el maquillaje de su rostro.

Seiko: No quiero desvalorizar tu trabajo... pero he estado oculta por tanto tiempo, me he sentido una abominación. Y ahora que encontré a alguien a quien no le asusto... prefiero ser yo misma. Con estas cosas y todo

Se preguntó si aquello era cierto. Recordó su amor por Dal, como el primer tiempo dolía y luego era simplemente algo a lo que estaba acostumbrado, por lo que no sabía si lo había olvidado o si ya le daba igual.

Yure: ¿Estuviste enamorada alguna vez?

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Sonrió, acercándose a ella, para ayudarla a quitar el maquillaje de sus mejillas.

Stred: Esto -mostró su mano manchada- es simplemente para cuando quieras salir a la calle y no sentirte juzgada ni maltratada. Pero cuando estés conmigo, no hace falta que lo tengas, ¿sabes?

Conn: No. Pero he superado la pérdida de mis padres, así que ¿no es parecido? Es un dolor que... luego desaparece. Ya sea porque estas acostumbrado, o aprendiste a lidiar con ello.

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Se sonrojó, y asintió varias veces, queriendo abrazarlo nuevamente. Se sentía como una niña nuevamente, aunque realmente no podía evitarlo.

Seiko: Gracias...

Por primera vez no se sentía avergonzada de quien era.

Yure: No creo que sea lo mismo, quizás lo tuyo es más fuerte que un simple enamoramiento

Aunque a ciencia cierta, no podía saberlo. Lo único más similar a un padre que había tenido era Baba, y teniendo en cuanta que le había usado para cometer crímenes...

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Se acercó y le besó la frente, para luego alejarse sonriendo.
Observó la hora, era algo tarde. Y no sabía qué tan lejos era que Seiko vivía. La observó, algo consternado.

Stred: Es tarde, ¿te molesta que te acompañe a tu casa?

Se encogió de hombros nuevamente.

Conn: Pero se supera. Como todo...

Hizo una mueca. ¿Acaso se podía sentir amor por un amigo? No el amor hacia una pareja... aunque a decir verdad, nunca había podido considerar a nadie su "amigo". Quizás ahora tenía la posibilidad, con Dal y Yure. Hasta estaría dispuesta a aceptar a Len.

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Se ruborizó completamente. Tartamudeó un poco y luego simplemente calló y suspiró. ¿Cómo decirle?

Seiko: Realmente no tengo casa. A veces duermo en cuevas, otras en casas desocupadas... me baño en los ríos y me alimento con lo que encuentro...

Se rascó la nuca, soltando una risita nerviosa, sin observarlo a los ojos.

Seiko: Así que realmente no tienes que acompañarme a ningún lugar, encontraré algún sitio

Se encogió de hombros. Quizás no todo se superaba y por eso la gente terminaba con cicatrices emocionales. O quizás sí, y todo eso era una patraña sin sentido.

Yure: ¿Será bueno enamorarse?

Su amor por Dal no había llegado a los niveles de Len, quizás. Se sentía tan ajeno a todo ese tema, que le era extraño.

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Golpeó su mano contra el mostrador de la entrada, claramente molesto. ¿Estaba bromeando, no es cierto? La observó, buscando una negativa, para luego gruñir. ¿Qué demonios?
Se acercó a ella, tomándola de la muñeca, acercándole su capa, para luego obligarla a caminar detrás de él, saliendo del local.

Stred: Vivirás conmigo de ahora en más, entonces.

Conn: La gente parece ser feliz... mientras dura. Pero luego sufre.

Suspiró. Volvió a abrazar sus rodillas, sin dejar de estar apoyada sobre la cabeza de Yure. Cómo habían terminado hablando de un tema tan profundo, no lo sabía.

Conn: Quizás sea algo por lo que todo el mundo pasa... Quizás es natural en nosotros buscar la compañía de la pareja.

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Se encogió un poco ante la reacción de Stred, pensando que se había molestado con ella. Se intentó resistir al ser tomada, una reacción involuntaria producto del miedo a la violencia, pero se dejó arrastrar y se tranquilizó al oírlo... ruborizandose luego.

Seiko: P-P-Pero... No puedo aceptarlo, no...

¿Cómo podía? Se sentía una abusadora, ¿por qué era tan amable con ella? No era nadie. No merecía tal trato.

Yure: Quisiera vivirlo... aún si luego tengo que sufrir

Tener a alguien para tí, siempre. Era algo que extrañamente le hacía desear que le sucediese a él. Pero, ¿era necesario sufrir? ¿Realmente estaba dispuesto a sufrir aún más sólo por sentirse realmente querido?

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Siguió caminando, sin detenerse. Quería llegar a su departamento, sentir que podía sacarla de esa pesadilla a la cual llamaba vida. Gruñó levemente, doblando en un callejón que siempre era su atajo.

Stred: Mi departamento es pequeño, ya que gracias a eso pago poca renta. Y seguramente deberemos ocultarte hasta que se me ocurra qué decirle al casero, pero ¿no es ningun problema, no? Tendrás comida, una cama, un lugar donde bañarte o donde esconderte si es que te sientes mal. Por eso, está bien ¿no?

Sonrió. No sabía si ella quería experimentarlo, aunque si tenía curiosidad por saber qué sentias exactamente estando enamorado.
Deslizó su mano por el banco hasta tomar la mano de Yure en la suya.

Conn: No sé que se sentirá amar a alguien. Pero me siento a gusto contigo.

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Se soltó ahora si de su agarre, retrocediendo unos pasos. Apoyó su espalda contra la pared, ocultandose en las sombras como solía hacer.

Seiko: ¿Por qué? No soy más que un fenómeno... ¿por qué me ayudas?

No sentía que merecía la ayuda. Se sentía un monstrou. Todos la habían obligado a creer que ella era algo que debía desaparecer.
Se abrazó, oyendo los gritos de odio en su cabeza.

Se mantuvo en silencio, para sonreír finalmente al oírla, tomando su mano tambien.

Yure: Yo tambien me siento a gusto contigo

El sentimiento era diferente al que una vez había tenido con Dal, pero era muy agradable. Cerró los ojos, relajándose. Finalmente, no le importaba donde estaba.

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La observó ocultarse y abrazarse a sí misma, provocando que se detuviera. ¿Estaba obrando mal, acaso? ¿Estaba siendo desconsiderado con ella? Bajó la mirada, temblando de ira hacia sí mismo.

Stred: Lo siento, no quería forzarte...

Podía sentir el cuerpo relajado de Yure. También podía sentir algunas miradas curiosas, las mismas que ella daba cuando creía ver una pareja.
¿Estaba acaso enamorada de Yure? No lo creía. Pero tampoco le importaba, simplemente disfrutaba de sentir que podía confiar en alguien y pasar un buen momento.

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Comenzó a temblar. Tenía miedo, sentía desprecio hacia lo que era, hacia lo que le había ocurrido. Quería esconderse, pero las personas la encontrarían y la atacarían.

Seiko: Si me ayudas... si te ven conmigo... te atacaran.

Yure: Nos están mirando...

No es que realmente le importase a esas alturas, había logrado relajarse de verdad. Pero supuso que decirle a Conn no estaba de más. Aunque, de todos modos, ¿por qué los observaban? ¿Qué había de extraño en ellos?

-

Al oírla, todas sus defensas cayeron a sus pies. Se sintió débil, se sintió frágil. Se acercó a ella, abrazándola con fuerza contra él, tranquilo.

Stred: ¿Por qué piensas que eso me interesa?

Conn: Supongo que parecemos una pareja. Y estamos tranquilos... eso atrae a la gente

Y por otro lado, significaba que los veían como normales. A ella no le importaba, pero sabía que para Yure era importante. Que lo tomasen como alguien "cualquiera"

Conn: ¿Te molesta?

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Se dejó abrazar, reconfortar, y sentirse una persona nuevamente. La crueldad, el abuso habían dejado una marca permanente en ella, y lo que menos quería era que otros la sufriesen por ayudarla a ella.

Seiko: En verdad... ¿en verdad lo dices?

(N/A: Ahora le meto drama ewe)

Negó con la cabeza. Por primera vez, no le molestaba que lo mirasen o que cuchicheasen al pasar a su lado. Se sentía tranquilo, relajado. En paz.
Estaba casi completamente dormido; no queria despertarse ni tampoco intentarlo. Le daba igual estar en medio de la calle o en su casa. Bostezó levemente, dejandose vencer finalmente por el sueño.

Yure: ...voy a... dormir un poco, Dal...

-

Asintió con la cabeza. Siempre le habían dicho que ser tan amable terminaría siendo su muerte, pero ¿quién podía negarle la tranquilidad y felicidad a una chica así? Tan sufrida, tan dolida. Tan sola, en un mundo tan grande.

Stred: Estoy aquí, preocupate por eso...

Sus ojos se abrieron repentinamente al oírlo, dejando salir una sonrisa diminuta luego. ¿Acaso esperaba otra cosa?
Sintió una puntada de celos. ¿Eso eran celos, verdad? y acabó por golpearse mentalmente.
Por supuesto que Yure estaba enamorado de Dal. ¿Qué significaba eso? ¿Qué ella estaba enamorada de Yure?
Su cabeza daba vueltas intentando ponerle un nombre a lo que sentía. Pero solo pudo contestarle:

Conn: Descansa Yure.

Quizás, después de todo, ni siquiera ella se salvaría de eso a lo que llamaban "amor".

(Mi nena no sabe lo que siente... me siento identificada )

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Tuvo que sacudir su cabeza para evitar llorar. No lo haría. Se había cansado de llorar hace ya mucho tiempo.
Alguien era amable con ella... y eso no tenía nada de malo.

Seiko: De acuerdo... vamos

Le sonrió, pensando que en cualquier momento despertaría de ese sueño.