~ Lost inside me

Xer: ¿Me trataras como una princesa por el resto del día?
Sonrio, arqueando una ceja. Justo ella, que no se parecía en nada a una. Ni en actitud y aspecto.

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Hell estaba haciendo todo lo posible para que no doliera, pero si lo hacía... solo que no era suficiente para decirle que se alejara. Acariciaba su nuca, relajandose de a poco, amoldandose.

Ek asintió. Despues de todo, estaba seguro de que nunca le habían tratado de tal modo en su vida, y que ser tratada de esa forma por un simple día no sería un problema.

Ek: Claro que si

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Suspiró, siguiendo con las caricias y los besos. Tenía razón, debería haber esperado más y no dejarse llevar. Se preguntó qué tanto dolor sentiría Cam. Besó la unión de su cuello y le mandíbula.

Hell: ¿Quieres que salga..?

Xer: De acuerdo... supongo que entonces diría que es buena idea ir a algún lugar... pero no se a cual
Lanzó una risita por su comentario. Increíble que no pudiera decir a donde ir. No conocía tantos lugares tampoco. Jugó con el tenedor en su boca, pensando.

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Negó con la cabeza. No, eso no era lo que quería, pero en cuanto hizo un movimiento, se arrepintió de ello. Se abrazó con más fuerza a el, no quería pero...
Cam: Si, hazlo...
... el dolor era demasiado.

Le sonrió, mientras pensaba por su cuenta. ¿Dónde llevar a Xer, para que siguieran en el papel de ser una persona romantica y dulce?

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Asintió, saliendo de ella con cuidado. Sonrió levemente al ver que no sangraba, por lo menos el cargo de conciencia no sería tan grave. Se acercó a ella, besando su mejilla y luego sus labios, para finalmente ponerse de pie, tomandola en brazos, llevandola a su cuarto. No importaba el agua en el suelo, luego se encargaría de ella. La recostó, sonriendole.

Xer: No importa, ya pensaré en algo
Sonrió, tomando a Ek de la mano, saliendo de la cocina y luego de la casa. No importaba adonde fueran si estaba con el.

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Suspiró al verse en la cama, acariciando el rostro de Hell con cuidado. No se arrepentía, a pesar de todo. No había pasado nada malo, salvo un poco de dolor.
Cam: ¿estas bien?

Sonrió, caminando detrás de ella. Se dejaba guiar como si fuera la mascota, pero realmente no le importaba eso. Ver a Xer feliz, relajada, por un día completo era su mayor recompensa.

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Dejó que le acariciara el rostro, para luego tomar las sábanas, recostandose a un lado de ella, cubriendolos. La abrazó contra él, acariciando su cabello. Agradeció mentalmente no tener que lidiar con una excitación, ya que la idea de haberle hecho doler a Cam había sido suficiente desmotivante.

Hell: Si, ¿por qué no lo estaría?

No sabía donde iba, solo caminaba, riendo, con Ek agarrado de su mano. Un día, un día en el cual actuaría así hasta el final. Se sentía como una niña, emocionada por alguna razón, e incapaz de actuar seriamente.

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Cam: Lucías tan culpable...
Sonrió, acurrucandose cerca de el, a pesar de su estado. No importaba, Hell no le haría daño, eso ya lo había comprobado

Le gustaba la idea de oirla reir, de verla feliz. Era su regalo más preciado. Se detuvo, abrazandola contra él, sin dejar de sonreir.

Ek: Te amo, Xer..

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Hell: Bueno, si tomamos en cuenta que te hice doler..

Acarició su espalda, trazando lineas invisibles vesticalmente. Tomaría más en cuenta el oir su lado razonable. Debería haber esperado, pero por el deseo... se había dejado llevar. Cerró los ojos, suspirando.

Le devolvió el abrazo, besando su mejilla
Xer: Te amo Ek, te amo y nunca dejare de hacerlo
Con nadie se había sentido tan segura, tan feliz, tan querida... y con nadie se había enojado como lo hacia con el, no había querido asesinar a alguien con tantas ganas como con Ek.

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Cam: Es normal eso...
Debía dejar de perseguirse, y de lamentarse. Cerró sus ojos, relajandose al sentir las caricias sobre su espalda.

*No sé qué hacer con EK XD*

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Suspiró, nuevamente. Reprimió una sonrisa, dispuesto a hacerla molestarse.

Hell: Supongo que me conformaré con las shinigamis y las akuma de mi mundo... despues de todo, deben estar esperandome

(Lol, bueno, dejalo ahí XD)

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Bufó, rechinando los dientes por unos segundos antes de sonreír
Cam: No molestes a alguien que puede patearte la entrepierna...

Dejó salir una risita, colocandose sobre ella.

Hell: ¿Por qué me golpearías, acaso tienes celos?

Escondió el rostro en su cuello, suspirando. Cam tenía un aroma extraño. No era a frituras, como su casa. Ni a muerte, como muchas conexiones tenían. Era un aroma dulce, tranquilizante... aun cuando ella sólo lograba estresarlo.

Hell: Además... soy tuyo, asi como tu eres mia

Lo abrazó, besandolo. No le molestaba ser suya, ya lo sabía desde que había tenido que confesar sus sentimientos a Lesius. No perdería su personalidad por eso, seguiría siendo la misma chica solo que... no con el. O eso era su intención.
Cam: ¿Quien dijo que yo era tuya?
Sonrió, riendo

Arqueó una ceja.

Hell: Bueno... eres mi conexión... y yo tomé tu virginidad. Eres mia.

Demasiado sincero, quizás, para el mundo mortal.

Bien, eso era cierto, pero había esperado algo más... ¿romantico? Lo ocultó con una sonrisa, apoyando su dedo sobre los labios de Hell
Cam: Solo evita mencionarlo cerca de mi colegio

Miró el dedo sobre sus labios, para luego mirar a Cam. No se lo diría a nadie, ese sería su secreto. Abrió los labios, tomando el dedo de Cam dentro de su boca, comenzando a lamerlo.

Abrió los ojos completamente al ver como lamía su dedo. Sonrió levemente, quitandolo lentamente, clavando la mirada en Hell.

Suspiró al ver que quitaba su dedo.

Hell: Me estás dejando sin diversión alguna... terminaré llendo al mundo shinigami en serio ~

Se recostó sobre ella, suspirando.

Tuvo que quitarlo, podía ver como solo un dedo podía provocar que la escena en la ducha se repitiera.
Cam: Nadie de ese lugar puede compararse conmigo
Lanzó una risita luego. Hablando de tener un ego importante...

Sonrió. Cam no sabía la cantidad de verdades que esas palabras ocultaban. Nunca había nadie como ella en el mundo shinigami. Ni tan terca, ni tan vivaz, ni tan necesitada de adrenalina, ni tan adorable y hasta dulce.
Se acercó a su cuello, besandolo, en un camino de bajada hacia sus hombros.

Hell: Lo sé

Cam: Supongo que también sabes que estaba bromeando...
Costaba creer que se lo tomara en serio. ¿De verdad? ¿De verdad decía que en todo ese lugar no había nadie como ella? Considerandolo, podía ser verdad. Después de todo, los humanos no eran como los shinigamis

Hell sonrió.

Hell: Lo sé, pero no quita que sea cierto..

Bajó los besos hasta sus hombros, mordiendolos con cuidado.

Acarició su espalda, cerrando los ojos, disfrutando cada mordida, cada beso. Entonces... ¿si era cierto? cada vez se asombraba más del mundo en el cual Hell vivía.

Hell: En mi mundo... las mujeres suelen ser sensuales y atractivas... pero realmente no valen la pena

Acarició su cintura, con cuidado.

Hell: Ninguna te hace sentir ese 'algo' especial, más que darte algo de excitacion y ayudarte con eso..

Bajó los besos un poco más, besandola entre sus pechos.

Lanzó un corto jadeo, extrañamente provocado por lo que decía Hell
Cam: ¿De verdad te hace sentir eso?
¿Alguien como ella? Hell debía tener algún problema si sentía eso justamente con ella.