Never been more dead than alive~

Lo observó con un poco de sorpresa. ¿Por qué reaccionaba así tan repentinamente? Le separó el rostro, obligandolo a que la mirara.

Xer: ¿Qué te sucede?

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Gruñó contra la espalda de Kui, jadeando con fuerza. No podría soportar mucho más.

Nyelo: Sólo... quiero saber

¿Qué tenía? Ni él lo sabía. Su corazón latía a mil, una mezcla extraña entre ansiedad y tristeza.

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Kui: Voy a... voy a...

Gimió con fuerzas, acabando sobre la mesa, dejandose caer.

¿Lo quería? Pues... si, estaba con el en ese momento, de alguna forma lo tendría que querer, pero además se preocupaba por el y no lo quería lejos.

Xer: Si te quiero

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Gimió, acabando dentro de Kui para luego salir de dentro de el, recostandose sobre la mesa, agotado.

Nyelo: Pero menos que a Ek..

Se refugió nuevamente en su cuello.
Ahora su latir era pesado, hasta doloroso.

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Al ver que salía, quitó su cola de su interior, llevandola hasta su boca, lamiendo.
¿Qué le pasaba? Realmente parecía un gato en celo.

¿Cómo habían llegado a eso? Suspiró, abrazandolo. No le mentiría.

Xer: Ek es mi novio... lo amo.

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Lanzó una risita, quitandole la cola de la boca, besandolo.

Nyelo: Claro...

De todas formas, no se movió de su lugar.
Entrelazó nuevamente su cola con la de ella, en silencio. Se sentía.. idiota.

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Correspondió el beso, para luego separarse y reir.

Kui: He roto mi propio limite..

Se mantuvo abrazandolo, manteniendolo cerca de ella. No podía evitar sentirse mal por el, como al mismo tiempo no podía separse.

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Nour: Siempre hay una primera vez para todo...

Apoyó su cabeza sobre su pecho, riendo el también.

Salió de ella suspirando, desenlazando sus colas y separandose del abrazo.

Nyelo: Lleva a Ek a dormir, yo tengo que irme

Vaya excusa, "irse".

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(Cero imaginación XD)

Tomó de la muñeca a Nyelo, con la intención de pedirle que se quedara, pero lo dejó ir al instante. Sería mejor si no estaba. Se levantó, caminando hacia Ek con un suspiro.

Se acomodó la ropa, saliendo de la casa. ¿Por qué estaba en medio de la pareja, qué lo obligaba a interrumpir? Suspiró, decepcionado.

Levantó a Ek, llevandolo hasta su cuarto y colocandolo sobre su cama. Se sentó en el suelo, a su lado, sonriendo al verlo dormir.

Abrió los ojos al sentir algo más blando que el suelo bajo él. Sonrió al ver la cama de Xer y ella observandole, para luego suspirar.

Ek: Vaya dia..

Xer: Lo se...

Gateó arriba de la cama, acurrucandose contra el, sonriendole.

La abrazó contra él, mirando al techo.

Ek: Le quieres... ¿no?

Escondió el rostro, apegandose a el todavía más. Asintió levemente, suspirando.

Ek: Igual que a mi, ¿no?

Le acarició la espalda, queriendo tranquilizarla.

Negó con la cabeza, alzandola al fin.

Xer: A ti te quiero más.

Ek. ¿Segura?

Dejó salir una risita.

Ek: Soy celoso, Xer... pero no me dolerá si me dices la verdad

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Era un niño de 5 años. Había crecido rápido. Y sabía escaparse tambien.
Lesius le tomó en brazos, suspirando. Lo malo de los niños shinigamis era que el primer poder a usar eran los portales

Xer: Ek, no te estoy mintiendo.

Lo amaba a el, y no podía imaginarse que haría sin el. Lo que sentía por Nyelo... todavía tenía que definirlo.

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Suspiró, arrojando libros de la escuela por los aires. Algo que no podía hacer era cuidar a un niño, el cual se vivía escapando, y estudiar. Al menos tenía a Rin y a Lesius para ayudarla.

Rin: Cam, deberías prestarle un poco más de atención.

Sonrió, besandola.

Ek: Sabes que él te quiere, ¿no?

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Entró en casa de Rin, suspirando.

Lesius: Le he dicho que yo lo cuidaría, pero... es bastante testaruda

Asintió levemente, lo sabía, todavía no podía olvidarse de cuando habían estado solos y le había propuesto el ser suya solamente.

Xer: Aunque no entiendo porque

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Cam: No puedo ir tras el, no puedo abrir portales.

Apareció detrás de su amiga, bufando. Hacia lo que podía con lo que sabía, y cuidar a un niño shinigami era mas dificil de lo esperado.

Ek: ¿No lo entiendes? Te lo he dicho muchas veces...

Volvió a besarla, para luego acariciarle el cabello.

Ek: Eres una especie de tesoro, Xer... tanto para un muchacho no-muerto solitario, como para un muchacho problemático y al cual nadie quiere...

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Lesius: Por eso dije que lo cuidaría..

Hizo aparecer un extraño juguete, haciendo que Hell riera y lo tomara en manos.
Otro punto a desfavor era que los niños shinigamis solían demorar en hablar.

Bufó, ¿Y qué si así era? Solo lograba traerle sufrimiento a uno, y hacer que el otro se preocupara por ella. Vaya tesoro.

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Cam: Entonces no te quejes...

Rin suspiró, ¿Siempre tenía que hacer ella el trabajo de decir lo que en verdad quería?

Rin: En otras palabras, esta agradecida, pero no quiere decirlo.

Ek: Es extraño..

Se acurrucó contra ella, suspirando.

Ek: Sé que a lo largo de la historia serás suya & yo seré la mascota

Dejó salir una risita.

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Lesius: Lo sé...

Dejó a Hell en el piso, que caminó hacia Cam, tomandole de la mano.
Lesius sonrió al ver el sueño fruncido del pequeño.

Lesius: Se está esforzando..

Xer: ¿Por qué pasaría eso?

Frunció el ceño, lanzando un gruñido. ¿Por qué el sería la mascota?

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Suspiró, tomando al pequeño Hell y alzandolo. Lanzó un pequeño gruñido al notar que estaba cada vez más pesado.

Cam: Debes dejar de comer Hell.