In my arms, a new life ~

Kui: Supones bien

Se acercó a él, besandolo, para luego separarse con una sonrisa aun más amplia que antes.

Kui: ¿Algo que necesites o quieras antes de que me vaya?

Nour: Besame otra vez
¿Cuanto tiempo se iría? Siendo el, podía 'jugar' con alguien demasiado tiempo.

Sonrió, volviendo a acercarse a Nour, cumpliendole su pedido con pasion y dedicación.
Se separó al cabo de unos segundos, jadeante y sonriente.

Kui: ¿Seguro no quieres ir?

Nour: Me estas tentando...
Sobre todo con esos besos. ¿Cómo elegir algo así?

DEjó salir una risitaa infantil, mientras comenzaba a restregarse contra el cuerpo de Nour, como un verdadero felino.

Kui: Pues elige rápido, mi juguete sino se pondrá ansioso

Nour: Dejame levantarme. Ya sabías que no podría negarme después de todo
Se rió, mientras su cola se movía de lado a lado, nervioso de lo que podría pasar. A su vez tenía curiosidad por donde estaba este juguete. Seguro era un lugar de la casa que nunca había visto antes

Sonrió infantilmente, desatando a Nour para pasar a tirar de él y obligarle a caminar detras suyo por los pasillos. Sin dudarlo, su camino fue directo hacia el sotano. Sabía que era un area no explorada para Nour y que seguramente le pondría los pelos de punta un par de dias pensando en qué hubiera pasado si hubiese terminado allí, pero no acabo con sus teorias al ver a Beivan gimoteando e intentando juntar sus piernas para dejar de gemir. ¿La curiosidad haria que Nour preguntara o que se mantuviera mudo?

Nour: ¿Qué...?
Guardó silencio al ver el lugar donde habían entrado. El vello de su nuca se erizó, sobre todo al ver a Beivan atado y vendado. ¿Ese era su juguete? Miró a su alrededor, con cada vez más miedo. Empezaba a arrepentirse de su decision.

Kui: Este es el sotano de mi casa, la mitad de él es una mazmorra porque mis padres asi decidieron que sería mejor interrogar a sus victimas...

Ató a Nour a un lado, cercano a Beivan, pero no lo suficiente, para luego acercarse al último, acariciandole la cabeza, provocando que Beivan sonriera ampliamente. Kui repitió el gesto.

Kui: ¿O preguntabas sobre él?

Nour: Los dos. ¿Cómo accedió a esto?
Seguí observando el lugar. Sentía escalofríos. Se recordó a si mismo no explorar el resto de la casa, quien sabe lo que podía haber.

Kui: Pues... que él te cuente, preguntale...

Sonrió, mientras se mantenia en su lugar, acariciandole la cabeza con cuidado.
Beivan se sonrojó aún más que antes. Quizás porque mantenía su amor platónico hacia Nour, quizás porque debía afrontar la realidad que había buscado y creado, o quizás porque sabía que Kui estaba ahi.

Giró su cabeza, observando a Beivan. Todavía recordaba la última vez que habían estado los dos con Kui.
Nour: ¿Por qué accediste a esto Beivan?

Beivan giró levemente el rostro hacia donde había oido a Nour, sabiendo que no podía verle. Su sonrojo aumentó.

Beivan: Sentí... curiosidad... y le pedi a Kui que me dejara ser suyo un día... -se mordió el labio inferior, bajando la mirada- Kui me dijo que para eso, debía ser su juguete o su mascota... y como no tengo orejas ni cola... decidí ser su juguete...

Kui se acercó a Nour, recostandose sobre su pecho, dejando salir un suspiro. Beivan tembló levemente el sentir el ambiente frio a su alrededor de vuelta, provocando que se mordiera el labio nuevamente.

Beivan: y... no me arrepiento...

Apoyó su cabeza sobre la de Kui, suspirando. La curiosidad mató al gato decían, pero el no parecía arrepentirse. Pero el sentía celos. Extraño, no quería estar en la siituación de Beivan, pero tanta atención que recibía le ponía celoso. Sobre todo porque lograba disfrutar tanto a Kui

Sonrió al sentir el aire sobre sus orejas, para luego clavar su mirada en Beivan. Le gustaba divertirse con él, usarle a su antojo y no sentir ni una pizca de culpa.

kui: Beivan, ¿acaso te dije que cerraras las piernas?

El susodicho las abrió obedientemente de nuevo, sin poder contenerse a volver a gemir y jadear constantemente.

Se inclinó hasta quedar a la altura de las orejas de Kui, susurrando.
Nour: ¿Qué tiene entre ellas?
Fulminó a Beivan con la mirada, ocultandolo de Kui

Kui: Quitando el afrodisiaco que toma todas las mañanas, tiene dos vibradores. Uno pequeño, y otro mas grande, que empuja al pequeño & en velocidad rápida.

Notó como Nour le intentaba ocultar de Beivan, quien no dejaba de gemir. No logró ocultar la sonrisita prepotente que sobrevino a esto.

Nour: ¿desde cuando es tu juguete?
No pudo ocultar el tono de sorpresa y enojo que había en su voz.

Kui: Pues... no más de dos semanas, creo...

Levantó la vista, clavandola en Nour. Estaba molesto, podía descubrir eso rápidamente. Suspiró, acurrucandose contra él, restregando su cabeza contra su pecho.

Chasqueó la lengua, sin dejar de observar a Beivan del todo, aun cuando había girado su cabeza, para centrar su atencion en Kui. No podía enojarse con el, era su forma de ser... pero si podía enojarse con Beivan

Kui: ¿Por qué te molestas?

Sonrió, levantandose lo suficiente como para besarlo, sentandose a honcajadas de él en ese acto.

Kui: ¿Acaso me quieres solo para ti? Gato egoista

Nour: Entonces soy un gato egoísta...
Volvió a besarlo, intentando olvidar el lugar donde estaban, y a Beivan. No tenía porque enojarse, ¿verdad? El era el novio de Kui... pero igual era molesto

Ronroneó, para luego separarse del beso.

Kui: ¿Quieres jugar con él primero?

Nour: ¿Lo que quera?
Observó a Beivan con una sombra de venganza en los ojos.

Kui asintió, sonriente, para luego pensar y ponerse serio.

Kui: Siempre que no rompas mi juguete...