In my arms, a new life ~

Se giró, quitando la sabana hasta la altura de sus ojos, pudiendo ver a Yure ahora.

Riz: Me refiero a... ¿Tu acaso quieres que lo intente?

Si no sentía nada por ella, ¿para que intentarlo? No iba a cambiar su forma de ser, ni de actuar, pero, ¿por qué se lo decía?

Yure: No lo sé.. es.. raro..

Chasqueó la lengua, acercandose a ella, para bajar la sábana lo suficiente como para poder besarla. Se separó, para dejarse caer de espaldas a un lado de ella.

Yure: No sé qué pensar o qué hacer contigo..

Se dejó besar, suspirando al oirlo. ¿Cómo se suponía que hiciera algo cuando ninguno de los dos sabía que hacer? Una cosa era saber que alguien te gustaba y otra distinta era saber como actuar.

Riz: Pues... ¿Me consideras tu amiga? Podemos seguir así.

Yure: Ese es el problema... hasta antes de lo que dijiste, eras como mi mejor amiga, incluso mi hermana.. Y de repente...

Se tapó el rostro, suspirando.

Yure: No puedo verte más como antes, lo siento...

(Me suena... e.e)

Se esforzó por mantenerle la mirada, asintiendo levemente. Lo entendía, en parte, y no podía evitar sentirse como una tonta por haberselo dicho. Tendría que haberle mentido.

Riz: Lo entiendo. Lamento haberte puesto en esta situación.

Yure: No es tu culpa... Te entiendo, es difícil no decirlo... Y agradezco que seas sincera conmigo...

Se destapó los ojos, mirando al techo.
Riz había logrado desacomodar la realidad en la que estaba, dejarlo con los pies en el aire, sin saber bien qué hacer.

Riz: Pero te he complicado la existencia... ¿no hay forma de que lo olvides?

Odiaba pensar que lo había puesto en esa situación y que no podía hacer nada.

Yure: Imaginate la situación al reves.. ¿podrías olvidarlo? Es bastante complicado..

Dejó salir una risotada.

Yure: Quien quiera que sea que se ocupe de "convertir" en realidad los sueños, es bastante injusto..

No, no podría. Desvió la mirada, pensando en lo que decía. Quizás solo tenía un sentido del humor bastante retorcido y listo.

Riz: Tienes razón...

Yure: No te preocupes.. está todo bien, entiendo..

Le sonrió, para luego girarse de lado y abrazarse a ella.

Yure: ¿No te molesta si me quedo a dormir aqui, no?

Se sobresaltó al sentir el abrazo, pero no se corrió.

Riz: N-no. Quedate.

Apoyó su cabeza contra el hombro de ella, cerrando los ojos. Podía sentirla nerviosa, pero supuso era normal. Bostezó, durmiendose antes de lo planeado.

Suspiró al sentir que se dormia. No supo cuanto tiempo estuvo dandole vueltas al tema en su cabeza antes de quedar dormida ella también.

Se había escapado de la "guardia" de Len, decidiendo pasear por la casa. ¿Acaso Riz estaría en su cuarto? Podría ir y hablar con ella, como hacía un par de días no hacía.
Entró en su cuarto, para detenerse al llegar cerca a la cama. Una de las respiraciones era de Riz, pero... ¿y la otra? Un ligero gruñido entre sueños le ayudó a reconocer, sin poder contenerse a dejar salir una pequeña risita.
Finalmente sucedía, ¿no?

Una de las cosas que había aprendido era a tener un sueño ligero, por cualquier cosa que sucediera. Abrió sus ojos, levantando la cabeza un poco al recordar que Yure seguía ahí.

Riz: ¿Dal?

Dal: Lo siento, no quise molestar.. sigue durmiendo

Se dio media vuelta, comenzando a salir de allí en silencio. Esperaba que Len no fuera a buscarla, él si interpretaría mal las cosas seguramente.
Yure gruñó entre sueños, apegando a Riz un poco más contra él.

Cerró sus ojos con fuerza, controlandose. Dal sabía que Yure estaba allí, estaba segura. Solo esperaba que no sacara conclusiones y luego se lo pudiera explicar, ahora debía tranquilizarse, de alguna manera. Podía sentir sus latidos en sus oídos.

Salió con cuidado, cerrando la puerta en silencio. No pudo evitar reir levemente de camino a la cocina. Sabía que nada de "eso" había pasado, pero por lo menos las cosas no se veían mal encaminadas.

..

Abrió los ojos levemente, con un gruñido.

Yure: ¿Por qué te tensas tanto? Me hace mal al dormir..

Salió de su cuarto, sin encontrar a Dal. Odiaba que no le avisara cuando iba a salir, aun si se quedaba en la casa. Pasó por el cuarto de Riz, oyendo un ruido algo extraño, pero decidió ignorarlo, para luego dar con Dal, acercandose a ella.

Len: Me volverás loco...

-

Riz: Me estas abrazando... es difícil no tensarse.

Se obligó a relajarse, respirando hondo. No podía seguir así.

Se giró al oir la voz, sonriendo.

Dal: Lo siento, sabes que odio estar encerrada tanto tiempo..

Se mantuvo quieta, esperando que se acercara a ella. Despues de todo, aun no recuperaba la vista, y sabía lo mucho que molestaba a Len cuando de todas formas vagaba por allí.


-

Dejó salir una risita.

Yure: Matas demonios y te tensas por un abrazo..

La giró levemente para que pegara la espalda a su pecho, besandole el hombro luego. Dal solía relajarse con eso, supuso que quizás eran parecidas en ese sentido.

La abrazó desde atrás, besandole la mandibula.

Len: Si, lo se... Pero sabes que odio que no me avises.

Se sentó sobre una silla, sentando luego a Dal sobre sus piernas.

-

Giró el rostro levemente, para verlo, mientras besaba su hombro. Por alguna razón, si lo veía lograba no sonrojarse y actuar más normalmente.

Riz: No puedo evitarlo, soy así. Estoy acostumbrada a matar demonios.

Ya sobre las piernas de Len, sonrió. A veces solía tratarla como a una muñeca, pero no le importaba. Acarició su rostro, sonriente.

Dal: Lo siento..

-

Yure: Es decir que no estás acostumbrada a los abrazos..

Besó la mejilla de Riz, sonriendo.

Besó su mejilla y luego su sien, lanzando una risita.

Len: ¿Hay algo que deba saber sobre Riz?

-

No estaba a los abrazos de el, y menos en esa situación, no. Le sonrió, girando nuevamente para estar frente a el.

Riz: No, no estoy acostumbrada. Lo siento por despertarte.

Se tensó por unos cortos segundos, pero rápidamente se relajó.

Dal: Para nada, ¿por?

-

Sonrió al verla frente a él, apoyando su frente contra la de ella, cerrando los ojos.

Yure: No hay problema..

(lo peor es que toda la situacion de él durmiendo conmigo, fue asi XD)

Len: No lo se... quizás porque esuché un ruido extraño... que no le pertenecía a ella.

La abrazó con un poco más de fuerza, sonriendo inocentemente.

-

(Ah bien .-.)

Sonrió, cerrando sus ojos también.

Riz: Intentaré no molestarte.